Durante los últimos años el mercado de las lentes de contacto ha estado dominado por las lentes blandas moldeadas cuya fabricación es masiva con la intención de poder satisfacer a la mayoría de la población y a su vez abaratar el coste de las mismas aún sabiendo las limitaciones que estas lentes tienen. Es por eso que muchos especialistas se han interesado en las lentes blandas personalizadas. Éstas proveen un abanico de posibilidades casi ilimitadas donde cada uno de sus parámetros pueden ser personalizados, entre los más importantes podemos destacar:
- La altura sagital o abombamiento de la lente, que influirá en la calidad de visión final.
- El diámetro total de la lente, el cual dependerá del diámetro horizontal de iris, que marcará el confort final.
- La curvatura de la lente, la cual permitirá encajar perfectamente la lente en la córnea.
- Diámetro de la zona óptica, es decir la parte de la lente de contacto que esta graduada, pudiendo así reducir el espesor de borde de la lente y hacerla más confortable.
- Incrementos de la potencia de la lente según necesidad y ejes de astigmatismo en pasos de 1º, haciendo la corrección mucho mas precisa.
- Espesores de centro variables que permiten corregir astigmatismos irregulares los cuales influyen enormemente en la agudeza visual final.
Otros de los beneficiados en gran medida con este tipo de lentes personalizados son los pacientes présbitas, porque cuentan con diseños multifocales esféricos y tóricos, los cuales se pueden personalizar en todos sus parámetros, incluso en la ubicación de las zonas de visión lejana y cercana. Es decir, si queremos que la visión de cerca esté en el centro y la de lejos esté en la periferia, o la de lejos esté en el centro y la de cerca en la periferia, será posible. Últimamente en lentes de contacto progresivas incluso es posible modificar el tamaño de la zona de visión próxima para así ajustarnos más a los parámetros fisiológicos del ojo, los cuales se van modificando con la edad.
No dejemos que la tecnología realice nuestro trabajo, pero si tengámosla como aliada ya que su llegada nos permite estar a un paso más adelante de lo ya establecido. Seamos junto con ella un binomio exitoso para la solución de problemas oculares. El límite solo lo ponemos nosotros mismos.